Gente que se dio una vuelta


© Copyright

Si querés copiar y pegar, claro que podés; pero citá la fuente, ¿sí?. Gracias.

20 de mayo de 2010

Te lo agradezco, pero no.

Juro que es verdad. 
Viene una persona a verme. Primeras palabras:
-Hola, ¿qué tal?. ¿Estás cansado?, claro, con tantas cosas. ¿Estás solo, no? Y sí, mucho trabajo, ¿no?.
Sin respiro ni pausa. A lo cual mi contrapregunta fue: 
-¿Te interesa la respuesta?. Porque fijate que no me dejaste responderte.
Uy, empezamos mal, pensé. Bajá un cambio, me dije, respirá...
-No, vine porque quería ver... no sé, tengo tanto tiempo libre, quiero hacer algo.
DANGER!, a veces el "quiero hacer algo" es una manera de narcisismo o escape que ni te cuento, al estilo: "Qué bueno pasar por el hospital... Se ven tantas cosas, y yo que me quejo por pavadas".
-Ajá, algo... ¿Qué, por ejemplo?.
Les dejo a su imaginación los ejemplos, desde, pero sería como desde estudiar ballet zulú a dar vueltas carnero en la luna.
-Mirá, está bueno que quieras dar una mano, pero también que pienses un poco más en qué área te sentirías cómoda.
No hubo modo de hacer que entienda. Ella quería ayudar, yo tenía que resolverle dónde. ¿Dónde podría causar el menor daño posible?. Por mi cabeza desfilaban desastres que iban sucediendo a medida que "ayudaba a otros". Pero lo importante es que ella se sintiera bien. El costo es lo de menos.
Sí, abunda la gente así de buena. Lamentablemente.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola P.
Mirá la nota de la Nacion ¿Que es el bicentenario? de A. Rozitchner.
Interesante y en la linea.
Abrazo.
Fuimos a las Cataratas!!!
Juan G

Pablete dijo...

Ay, Juan querido... La leí on-line y me asusta haber coincidido un par de veces con este sr.. Pásenlo lindo, que es un lugar tremendamente bello.