Gente que se dio una vuelta


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24 de marzo de 2010

24 de marzo

24 de marzo. En 1976 se producía en Argentina el último golpe militar, inaugurando largos años de infamia y muerte. Años precedidos por la ineptitud de la sra. María Estela Martínez y el nefasto López Rega con su más nefasta triple A. En ese momento no lo sabía, pero varios desaparecidos se iban a cruzar en mi vida: al menos sus hermanos, hijos, hijas, nietos, madres.


24 de marzo. En 1980 asesinaban en El Salvador a monseñor Romero. Ya habían asesinado a Rutilio Grande; los seguirían Jean Donovan, Maura Clark, Dorothy Kazel, Ita Ford, cientos de campesinos, catequistas, animadores y animadoras de comunidades.


Curiosamente, ambos hechos realizados por la derecha militar, que entrenada por USA para defender a América Latina del demonio rojo del comunismo, no dudó en bañar al continente con el rojo de la sangre de sus propios hermanos y hermanas. Con el agravante de ser una violencia ejercida por el quienes tenían o detentaban un poder arrebatado.


30.000 en Argentina, miles en el continente, en nombre de la civilización cristiana y occidental.  Qué ganas de ser oriental y budista, entonces.


Los reclamos de justicia no cesan, la verdad no sale acabadamente a la luz. Al ritmo que vamos, dudo que suceda. Falla la voluntad: la voluntad de verdad, la de pedir y ofrecer perdón, la de asumir culpas y responsabilidades. 


El lazo negro no sólo es luto por quienes no están. Es luto por lo que no será. Con la esperanza tenaz de que sea. Nunca más.

1 comentario:

Gui dijo...

La historia de nuestro pueblo, como de muchos de la gran América Latina, es sangrienta y mentirosa la forma de contarla. Recuerdo la primera vez que supe algo mínimo de lo que había pasado en Argentina en la última dictadura militar (siniestra historia). Era muy chica. En 1983 tenía 13 años y recien se empezaba a decir algo de lo sucedido. Espero que la humanidad aprenda, conozca y crea que es posible un mundo de amor verdadero, de paz entre todos. El planeta lo necesita.