
El protagonista es Oskar, un nene de 9 años cuyo papá murió cuando cayeron las torres gemelas. El niño es híper auto-consciente, sumamente sensible, más adulto que los adultos en algunos planteos.
Algunas cosas de las que razona o dice me contactan con mi propia niñez y me dan ganas de ir a decirme a mí mismo: disfrutá más, jugá más, reíte más.
Ojalá me escuche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario