
No sé si en algún lugar de Argentina se congelan los lagos. Nunca vi nenes con patines de hielo en la TV sino en una peli extranjera.
La imagen de la caída, la sensación de frío, la posibilidad de congelarse o ahogarse me aterraban.
Invierto la metáfora: hoy me alegro, celebro, gozo cuando se quiebra la capa helada, superficial habitual aún en pleno verano y puedo sumergirme con otros/as en algo más profundo que la piel, que un charco, que la mera opinión, que el sólo reaccionar, que... que lo habitual.
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