A veces me siento terriblemente afortunado. Burguesamente afortunado. Y un poco de culpa me invade; es una macana, pero es así. Ver alrededor a otros que la sufren y la pelean tantísimo, me da pudor al momento de compartir algunas cosas que cuento. Entonces, me acuerdo que de a ratos también la peleo y sufro, como todos. Por eso es que momentos así, cosas como estas, son tan valiosas.
Cosas o momentos como haber podido gozar de la salida con los peques, y gozar de ellos. Como un encuentro demorado, sabroso de sabores y de charloteo. Como poder sintonizar o vibrar momentáneamente en la misma cuerda con alguien. Como saber que hay personas que admiro mucho y que, me admiro más aún, me quieren. Como olvidar por unos momentos lo feo y duro y emocionarme con un texto, con una película.
Terrible y burguesamente afortunado. Sépanlo.
29 de julio de 2011
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1 comentario:
Tener una buena vida no es burgués, por que no tiene que ver con lo que "tenés" si no con quién sos y haces mucho por "ser", así que a disfruar, y sin culpas por que disfrutar es a lo que más estamos llamados a ser, FELICES!!
PD Sorry las "", las MAYÚSCULAS, y los !! al final de la frase al uso inglés! "CUAC"!!
Vale
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