Hay una oración judía que los practicantes rezan cada día: el Shemá Israel. Transcribo parte:
Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios, el Señor uno es: Y Amarás a el Señot tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todo tu poder.
Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón:
Y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes:
Y has de atarlas por señal en tu mano, y estarán por frontales entre tus ojos:
Y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus portadas .
Me hace desear que al inicio de todo haya silencio para recibir; espacio para acoger, lugar donde morar.
Lo demás se dará por añadidura.
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