Necesario para mirar y no volver, por defecto o exceso, a lo mismo.
La memoria dolorosa de los desaparecidos y de otros arrebatados de esos años tremendos, me hicieron cuestionar si era o no correcto llevar escarapela, incluso intercambiamos ideas con Mariano. Decidí usarla, con un poco de cinta negra: la escarapela por lo del día nacional, la cinta negra por el duelo.
Pero no sólo duelo por los que han sido arrebatados, sino (me) duelo por cuánto nos cuesta esta memoria, este ser argentinos plurales pero no opuestos, este país que amamos y no amamos irremediablemente.
Me duelo, pero recuerdo, celebro y proyecto. No estamos solos.
1 comentario:
Comparto 100%, como nos cuesta, pero que lindo sentir que de a poquito los jovenes nos vamos empapando de vuelta en politica.
Una vez mas FELICITACIONES por tu claridad y sencibilidad a la hora de escribir!
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