Incluso cuando no hayan sido apropiados sino adoptados de buena fe (no sé si entre los 110 habrá habido alguno, en verdad), el origen es fundante. No fueron dados por sus m/padres: fueron arrebatados y sus m/padres asesinados. Es más, las embarazadas, como botín de guerra, eran valiosas mientras estaban en ese estado. Incubadoras humanas para sus captores, torturadores y asesinos.
La esperanza de mejorar la raza o la nación se repite desde antes del nazismo -algunas niños judíos, niñas, sobre todo, si pasaban por arias, eran enviadas a orfanatos para desjudaizarlas y entregarlas a familias no judías. Una táctica del terror fue y es violar y embarazar a las mujeres del enemigo, para que lleven a sus enemigos en el vientre.
Vuelvo: no sé por qué me conmuevo. Debe ser que el eco de tantos niños/as violentados, mujeres violadas y embarazadas a la fuerza, identidades rotas se sana, de algún modo extraño, en cada uno que se reencuentra con su identidad.
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