Recién llegado

Un domingo espeso, con humedad del 100% y casi 20º. Neblina baja a media mañana, esos días que parecen irreales, casi en blanco y negro. La casa es un caos de polvo y olor a cemento: el living y la cocina refugian los muebles amontonados. Los mosaicos van a ser colocados recién el próximo fin de semana.

Hago aparecer el sofá y la tele para que la noche no me agarre desprevenido; desbloqueo la cocina para poder calentar agua y tomar unos mates. Arrincono una pila de cinco sillas más alta que yo. 

Vibra el celular con un mensaje entrante: Nació Joaquín a las 5,15 am, 3,970 kg.

Asoma lo nuevo, cálido.

A empezar el día.