Flor comentaba, preocupada, varios casos de bullying que se dan en el colegio en el que trabaja. Lo decía por los chicos.
Me sonaba que tiene que ver, para mí, con la falta de palabra. Digo: si hoy te mando al cuerno y mañana somos amigos, como si nada -políticos, famosos, actores sociales, parejas-, ¿cómo creer que la palabra tiene peso, que produce algo?.
Son los niños, pero también somos los adultos, los padres, los jefes, los docentes, los abuelos, los adolescentes...
La palabra no tiene peso, las manos tampoco.
Eso pasa.
3 de junio de 2011
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3 comentarios:
Además de su peso, ¡creo que faltan palabras! Falta diálogo. Si no sé ni siquiera cómo intercambiar ideas, discutir, más fácil te pego :(
La falta de palabras es tremenda, es una forma de violencia que no terminamos de ver... Ivonne Bordelois, en La palabra amenazada -y en otros lugares también- toca el tema.
Gracias Penélope!
La cobardía de la nueva era.
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