- la invitación al ayuno, limosna y oración, heredadas de la tradición religiosa judía
- la invitación a la conversión, heredada de la tradición profética judía
Lo primero, creo, nos des-centra: nos corre del medio al recordarnos que no somos esclavos -de la comida, como signo amplio de los bienes-; que somos hermanos -al preocuparnos y ocuparnos de los más pobres-, que no somos dioses -al religarnos con el que nos libera y fraterniza.
Lo segundo, lo explico desde el término hebreo nhm, que como raíz aparece en consuelo, compasión, causar pena (depende de algo así como si es pasivo o activo verbalmente); y el término griego que usa el NT, metanoia -meta, más allá, noia/nous, razón, mente, conocimiento. Acabada la disgresión etimológica: viene a ser, a mi entender, cambiar la mente al ver con compasión, al apenarse de o con...
Creo que es desafío a mirar desde las entrañas (rhm) de Dios y por eso, elegir bien, elegir distinto, elegir la solidaridad horizontal por medio del ayuno que deviene limosna (me privo de para compartir con) y la solidaridad vertical, si cabe la expresión: como me sé contenido, compadecido, entrañable para el Otro, me animo a lo primero. Círculo creaturas, Creador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario